México revivirá el duelo inaugural ante Sudáfrica en el arranque del Mundial 2026
Carolina Loa
La Selección Mexicana abrirá oficialmente la Copa Mundial de 2026 enfrentando a Sudáfrica el próximo 11 de junio, en un duelo cargado de simbolismo que tendrá como escenario el renovado Estadio Ciudad de México. El sorteo celebrado este jueves confirmó que el Tricolor será protagonista del primer silbatazo de una edición mundialista que marcará un antes y un después por su formato ampliado y por su organización trinacional.
El destino quiso que México repitiera rival para su debut: la última vez que estas selecciones se enfrentaron en un partido inaugural fue en Sudáfrica 2010, un choque recordado por la explosión del gol de Siphiwe Tshabalala y el empate posterior de Rafael Márquez. Dieciséis años después, la historia se reescribe, ahora con los roles invertidos y el público mexicano como anfitrión.
Para México, el compromiso representa más que un inicio competitivo. Será la oportunidad de romper una racha que lo ha acompañado por décadas: nunca ha logrado ganar un partido inaugural cuando es anfitrión. Ni en 1970 ni en 1986 pudo imponerse en sus presentaciones, por lo que el encuentro contra los Bafana Bafana adquiere un matiz emocional y deportivo crucial.
El Estadio Ciudad de México, sometido a profundas remodelaciones para cumplir con los estándares actuales de la FIFA, será el escenario que reciba a miles de aficionados y millones de espectadores en todo el mundo. La expectativa es alta: se espera un ambiente vibrante, con una afición que buscará impulsar al Tricolor hacia un inicio alentador en un torneo que será histórico por su magnitud y formato.
Más allá del simbolismo, el duelo ofrecerá un termómetro real del nivel con el que México llegará al torneo. Sudáfrica, pese a no ser considerada potencia mundial, suele complicar con su velocidad y disciplina táctica, lo que anticipa un cotejo de alta tensión para inaugurar el certamen futbolístico más importante del planeta.
La Selección Mexicana abrirá oficialmente la Copa Mundial de 2026 enfrentando a Sudáfrica el próximo 11 de junio, en un duelo cargado de simbolismo que tendrá como escenario el renovado Estadio Ciudad de México. El sorteo celebrado este jueves confirmó que el Tricolor será protagonista del primer silbatazo de una edición mundialista que marcará un antes y un después por su formato ampliado y por su organización trinacional.
El destino quiso que México repitiera rival para su debut: la última vez que estas selecciones se enfrentaron en un partido inaugural fue en Sudáfrica 2010, un choque recordado por la explosión del gol de Siphiwe Tshabalala y el empate posterior de Rafael Márquez. Dieciséis años después, la historia se reescribe, ahora con los roles invertidos y el público mexicano como anfitrión.
Para México, el compromiso representa más que un inicio competitivo. Será la oportunidad de romper una racha que lo ha acompañado por décadas: nunca ha logrado ganar un partido inaugural cuando es anfitrión. Ni en 1970 ni en 1986 pudo imponerse en sus presentaciones, por lo que el encuentro contra los Bafana Bafana adquiere un matiz emocional y deportivo crucial.
El Estadio Ciudad de México, sometido a profundas remodelaciones para cumplir con los estándares actuales de la FIFA, será el escenario que reciba a miles de aficionados y millones de espectadores en todo el mundo. La expectativa es alta: se espera un ambiente vibrante, con una afición que buscará impulsar al Tricolor hacia un inicio alentador en un torneo que será histórico por su magnitud y formato.
Más allá del simbolismo, el duelo ofrecerá un termómetro real del nivel con el que México llegará al torneo. Sudáfrica, pese a no ser considerada potencia mundial, suele complicar con su velocidad y disciplina táctica, lo que anticipa un cotejo de alta tensión para inaugurar el certamen futbolístico más importante del planeta.
